Brotar al cielo en una voz cubierta de flores

Brotar al cielo en una voz cubierta de flores es el segundo poemario de la autora murciana Celia Marín Pérez (Beniel, 1983) tras su primer poemario Kamarsis, (2024, Postdata Ediciones).

Esta segunda obra poética es una reveladora afirmación de que compartir la vulnerabilidad del vivir, del amar y del sentir es una de las formas más profundas de caminar a la plenitud y la libertad, el camino al cielo. Cada poema es un brote de autenticidad y emoción que pone voz a lo más íntimo del alma de la escritora y a la de todos, a los pilares vitales que a todos nos unen (los pasos adelante, los miedos, las debilidades, la incertidumbre, los cambios a una mayor autoestima,…).

Es por tanto una poesía confesional y apasionada que refleja transparente lo que sentimos con la vida, pone palabras a lo invisible que todos llevamos dentro, siendo cada poema un espejo donde mirar nuestros propios brotes al cielo con esperanza, verdad y sanación. Lo hace con una voz contemporánea, cercana, con mucha valentía y frescura, sin ornamentos excesivos, fácil de comprender y de leer su mensaje dulce, que nos sirve de guía para la vida.

El poemario está organizado en 5 secciones temáticas: reflexiones sobre la vida y sobre sí misma, la maternidad como un corazón pequeño que late, el amor más vivo y enamorado y la poesía erótica.

La autora, con esta última parte, nos descubre por primera vez en esta obra su poesía más íntima y orgánica, la poesía erótica con la que quiere dignificar la energía sexual en nuestra cultura, desde una voz femenina que consagra la sexualidad como parte natural del ser humano, y en concreto de la mujer, a la que históricamente se le ha escondido y castigado su derecho al placer.